En esta ocasión vamos a descubrir el mensaje que, aparentemente vacío, se esconde en nuestro papel.
Para ello necesitamos: un
papel, un limón, un bastoncillo o un palillo, un exprimidor, un cuchillo, una
vela y un mechero (siempre con ayuda de un adulto).
Cortamos, con mucho cuidado, el limón por la mitad y lo exprimimos. Con el zumo y un bastoncillo escribimos nuestro mensaje secreto. Lo dejamos secar, hasta que desaparezca. Ya solo nos queda calentarlo con la vela y…
¿Qué ha pasado?
¿Por qué
crees que ha sucedido?